Son muchos los factores que nos impiden hacer todo el ejercicio que deberíamos, algunos externos como el trabajo o la falta de tiempo y otros contra los que solemos perder la batalla como la pereza. Sin embargo, cada vez somos más los que tratamos de sacar algún hueco entre semana para no sentirnos tan mal con nosotros mismos y estar en forma. Nos preocupa la salud, el aumento de la vida sedentaria y nuestro físico principalmente. Como no queremos más excusas, ahí van algunos ejercicios para hacer en casa y ponerse en forma.

Calentamiento

El paso más necesario y el que más olvidamos. Antes de empezar a hacer nada es necesario estirar los músculos y realizar ejercicios de calentamiento como el skipping o lo que se conoce de toda la vida como correr sin moverse del sitio, elevando las rodillas rápidamente. Los expertos de Krissia nos recomiendan empezar con tres series de quince repeticiones cada una de ellas.

Sentadillas 

Son el mejor ejercicio para fortalecer las piernas y los glúteos, y eso nos interesa, sobretodo a las mujeres. Abrimos las piernas a la altura de la cadera aproximadamente, para después flexionarlas obteniendo un ángulo recto. No olvides tener la espalda bien recta, lo ideal en este caso es hacerlas en frente de un espejo para asegurarse de que la postura es la correcta. 

Se puede jugar con este ejercicio que ofrece muchas posibilidades como abrir más o menos las piernas o poner peso añadido a nuestro cuerpo para hacer un extra de esfuerzo.

Planchas

Nos tumbamos en el suelo boca abajo y el reto está al levantar nuestro propio peso con los antebrazos. Una vez levantado, debe estar en paralelo al suelo por lo que el espejo nos volverá a venir muy bien. Al principio puede que nos basten los dedos de una mano para contar las que somos capaces de hacer pero es uno de los ejercicios en los que más mejoría notamos con el paso del tiempo. 

Flexiones 

Lo bueno de estar en casa es que nos podremos servir de una silla, la cama o incluso el sofá, pero no para sentarnos precisamente. Para los bíceps debemos apoyar los pies sobre la cama, boca abajo, y con el cuerpo estirado y las piernas a la altura de los hombros, flexionamos los brazos.

Para trabajar los tríceps, nos ponemos de espaldas a la cama, apoyamos las palmas de la mano sobre esta y con las piernas flexionadas en ángulo recto, flexionamos los brazos sujetando nuestro propio peso, echando los codos hacia atrás.

Zancadas

Es una de las mejores formas de fortalecer las piernas y los glúteos, y los primeros días notarás que incluso te tiemblan. Con los pies juntos, comenzamos a dar zancadas, formando siempre un ángulo recto con la pierna que avanza, dejando la otra casi rozando el suelo. Nuestra propuesta es hacer tres series de unas doce repeticiones y si te atreves con todo y más, coge unas pesas en cada mano y ¡a caminar!

Si ya intentas practicar deporte algunos días por semana, este puede ser el plus que necesite tu cuerpo para estar en forma, y puedes conseguirlo sin moverte de casa. Se acabaron las excusas.

 

 

Redacción Vanidad 

Imágenes: archivo y Giphy