En la moda femenina, al menos que se trate de un pantalón, habrás notado que los bolsillos son pequeños, escasos o inexistentes. Con un poco de suerte, podemos introducir nuestras manos con holgura en un vestido, como el que llevó Penélope Cruz en los Oscar 2022 de Chanel. Pero como no suele ser lo normal, acabamos escogiendo un bolso -y no por gusto- para poder llevar nuestras llaves. Así que la pregunta en realidad es: ¿por qué la ropa de hombre tiene tantos bolsillos y la de mujer tan pocos?
No es una respuesta fácil, pero afortunadamente Hannah Carlson se acerca un poco en su libro que acaba de aterrizar en las librerías "Pockets: An Intimate History of How We Keep Things Close". En Vanidad te damos una respuesta corta según las investigaciones de Carlson. Todo se resumen en la creencia de quién necesita los bolsillos. Sigue leyendo para enterarte de cinco secretos que guardan (literalmente) los bolsillos.
Imagen: Portada del libro "Pockets: An Intimate History of How We Keep Things Close".
1. 'We want pockets', una lucha histórica
Aunque ahora existe un activismo en redes con hashtags como #pocketsInequality o #WeWantPockets, y perfiles que hablan exclusivamente de este tema, como @meri.pocket, esta lucha no es nueva. No te asustes, no existe un complot global de personas poderosas que conspira para que las mujeres no merezcamos bolsillos. La responsabilidad de este desequilibrio es una mezcla de la historia, de la idea de que lo funcional no puede ser bonito y del mercado, pues una prenda sin bolsillos es más fácil de producir. Adivina quien ha salido perdiendo a largo plazo...
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2. Los secretos de los bolsillos
La autora de "Pockets" señala algo curioso: “A diferencia de las cremalleras, los botones y las trabillas, los bolsillos no nos ayudan a ponernos, quitarnos ni ajustarnos la ropa”. ¿Por qué los queremos entonces? Bueno, simplemente los deseamos. Los bolsillos representan una parte muy íntima del vestuario. Muestran cómo queremos mantener nuestras pertenencias cerca y cómo las cuidamos. De alguna forma, las escondemos de cara al exterior. Antiguamente, se cosían telas a la ropa con forma de saco que sirvieran para guardar objetos. Cada clase social lo hacía a su manera, con telas más o menos ricas y más o menos adornos, pero todas coincidían en el hecho de que ahí se guardaban las posesiones más privadas y, en muchos casos, las únicas. Esto refleja nuestra continua necesidad de privacidad a lo largo de la historia. Incluso los bolsillos internos, aunque son algo reciente, también son reflejo de la intimidad de nuestras pertenencias.
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3. Un eslogan político
El anterior punto nos lleva a este. Los bolsillos tienen un fuerte impacto político al haber simbolizado históricamente la desigualdad de género en la moda. La falta de bolsillos funcionales en la ropa femenina ha sido una lucha por la independencia y la igualdad. Durante la Revolución Francesa, los vestidos recargados de las mujeres hacían cada vez más complicado coser los pequeños trozos de tela -antes mencionados- a la ropa. Poco a poco, fueron desapareciendo del vestuario femenino. Algunas optaron por llevar bolsos, pero la mayoría de las veces, eran robados. Por eso, las mujeres optaron por llevar sus pocas pertenencias, a menudo privadas, en cinturones o pequeños bolsillos bajo sus vestidos, accesibles a través de discretas aberturas.
Esta lucha por la igualdad llega hasta nuestro días. Recuerda el emblemático traje blanco de Hillary Clinton en la Convención Nacional Demócrata (2016). Este traje guardaba un detalle que pasó desapercibido para muchos: la falta de bolsillos. Puede parecer un detalle trivial, pero en realidad, esta ausencia es un recordatorio de las desigualdades de género arraigadas en la moda y la sociedad.
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4. Rompiendo barreras
Diseñadores icónicos como Coco Chanel e Yves Saint Laurent se convirtieron en verdaderos pioneros al dotar a las mujeres de bolsillos funcionales. Chanel, con su elegante visión, demostró que la moda femenina no tiene por qué sacrificar la practicidad. Sus trajes y chaquetas para mujeres incorporaron bolsillos que no solo eran útiles sino también estilosos. Yves Saint Laurent fue un revolucionario al crear prendas unisex, lo que incluyó la inclusión de bolsillos funcionales en la moda femenina. Estos diseñadores no solo cambiaron la moda, sino que también desafiaron las normas de género, demostrando que las mujeres merecen la misma comodidad y estilo que los hombres. La igualdad de género en la moda ahora se refleja en la comodidad y la versatilidad de las prendas, demostrando que la moda puede ser funcional y tendencia al mismo tiempo. ¡Por eso nos encantan los cargo! Cada vez es más frecuente que la moda elimine las barreras entre lo masculino y lo femenino y por tanto, es más normal encontrar prendas unisex.
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5. Bolsillos adaptados a la era digital
Los tiempos han cambiado y los bolsillos tienen que evolucionar con ellos. Con los omnipresentes smartphones, la necesidad de bolsillos prácticos se ha vuelto aún más necesaria. La moda debe adaptarse a esta era digital, permitiendo que las todos podamos llevar nuestros dispositivos y objetos personales de manera cómoda y segura. Muchas marcas modernas han respondido a esta demanda al incluir bolsillos más funcionales en sus diseños.
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La próxima vez que te lleves las manos a los bolsillos, recuerda que llevas contigo una pequeña parte de la historia y una lucha por la igualdad. Ojalá pronto todos los tengamos igual de grandes.
Sofia Villar Báñez: @sofiavillarb
Imágenes: Instagram
