Ayer el Banco de España inauguraba la exposición «La tiranía del Cronos», que se abría con dos retratos de los Reyes de España, captando la atención de todo el país. Y no solo porque si las mirásemos de lejos casi que parecerían pinturas; como si los Reyes hubieran posado ante un pintor costumbrista, sino porque el objetivo detrás de ellos es una de las mejores fotógrafas de moda que alberga nuestra actualidad. 

Los retratos, aunque se exponen como individuales, tienen que verse como un díptico, pues uno es complemento del otro. La trasera escapa de cualquier aburrimiento y es la Sala Gasparini, una de las dependencias del Palacio Real, la que el pasado 7 de febrero acogió este momento histórico. 

La reina Letizia hace galantería de dos piezas históricas firmadas por el modista español Cristóbal Balenciaga; un espectacular vestido negro palabra de honor y drapeados, diseñado en los años 40 y cedido por la Fundación Antoni de Montpalau y un chal rojo que data de la década de los 60. Mientras, el rey Felipe VI viste el uniforme de capitán del ejército de tierra con diferentes condecoraciones que refuerzan su simbolismo institucional como el collar de la Real y Distinguida Orden Española de Carlos III.

Ambas figuras posan como lo hicieron sus antepasados, pero esta vez la mirada que los captura no utiliza pincel, sino el objetivo de una cámara. La autora es Annie Leibovitz (Connecticut, Estados Unidos, 1949), prestigiosa fotógrafa estadounidense que poco le tiene que envidiar a aquellos retratistas... pues ante su cámara han posado incontables figuras de gran relevancia. Hoy en Vanidad repasamos los más destacados de los últimos treinta años:

Todas las veces que Annie Leibovitz nos ha conquistado con sus retratos

Pensamos que los grandes fotógrafos nacen con la cámara al cuello, pero ese no fue el caso de Annie. Su interés por las instantáneas le llegó durante su segundo año universitario, mientras estudiaba pintura. Y, tras terminar los estudios, se unió como fotógrafa autónoma a la para 1970 revista emergente, Rolling Stone. 

Su trabajo allí duró diez años y en ellos documentó la emergente escena de la música rock, destacando la gira musical del grupo The Rolling Stones durante 1975 o el poderoso retrato que Leibovitz llevó a cabo en 1980 de la pareja de Yoko Ono y John Lennon. La escena muestra a un Lennon desnudo alrededor de la completamente vestida Ono. Ahora bien, si la Polaroid ya era poderosa en sí misma, aún lo fue más tras el asesinato de John Lennon, tan solo unas horas después de la sesión fotográfica. 

@annieleibovitz

En 1983, Annie se incorpora al lanzamiento editorial de la nueva Vanity Fair d onde asentó definitivamente las bases de sus retratos de celebridades, políticos y realeza, siempre con una iluminación de marcada influencia cinematográfica y una puesta en escena minuciosa y sofisticada. 

Pertenecientes a esta publicación son imágenes como la de Demi Moore embarazada, que ocupó la portada en 1991 y expuso el cuerpo femenino desnudo en un contexto nuevo y diferente; pues en lugar de enfocarse en la sexualidad, la imagen destacó la naturalidad y la vida. Tal fue su impacto, que la imagen ha sido replicada en multitud de ocasiones, incluso por la misma Leibovitz en un retrato de Serena Williams para la misma publicación. 

En los noventa, su relación con el grupo Condé Nast se extiende a Vogue, donde trabaja asiduamente aún en la actualidad con retratos que ocupan multitud de portadas, como la de Rihanna embarazada de su primer hijo, la actriz Zendaya, las cantantes Jennifer Lopez o la española Rosalía, pero también innumerables rostros políticos como el de la vicepresidenta estadounidense Kamala Harris para el reciente número de noviembre o la foto del matrimonio Zelenski en distintas localizaciones de un Kiev derruido que dio la vuelta al mundo.

@annieleibovitz

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Asimismo, Annie ha trabajado estrechamente con la firma de moda Louis Vuitton, para la que ha llevado a cabo multitud de instantáneas con el objetivo de alejarse de las típicas imágenes de moda, asociando los productos de la firma francesa a celebridades, pero también a su legado.

Las últimas han sido con dos duetos diferentes del mundo del deporte: el de los eternos rivales Messi y Ronaldo jugando al ajedrez sobre una maleta de la firma y la de los tenistas Nadal y Federer en los Dolomitas Italianos. 

@annieleibovitz

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Annie Leibovitz se ha convertido así en una de las fotógrafas más respetadas en las esferas culturales y ha sido conmemorada con multitud de premios. Desde nuestro país recibió el Premio Principe de Asturias de Comunicación y Humanidades en el año 2013. 

Asimismo, y aunque algunos no lo sepan, los retratos de los Reyes españoles no son el primer contacto con la monarquía de Leibovitz, pues ha tenido el honor de fotografiar en un par de ocasiones a la ya fallecida reina Isabel II de Inglaterra. La primera vez en 2007, con motivo de la visita oficial a los Estados Unidos. Semejante aventura no salió sin anécdotas: tuvieron un desencuentro inicial porque la fotógrafa quería que la reina se quitase la tiara que llevaba. 

@annieleibovitz

En el campo personal, su pareja más conocida fue con la filósofa y escritora Susan Sontag. La obra de una influyó en la otra y en 1999 crearon el libro «Women», en el que imágenes de personas famosas conviven con aquellas que no son tan conocidas y con escritos firmados por Sontag. Aunque los dos mantuvieron apartamentos separados, su relación duró hasta la muerte de Sontag a finales de 2004.

Por todo ello, el trabajo de Leibovitz ha dado paso a recuerdos visuales duraderos de nuestra historia reciente y sus retratos la han convertido no solo en una de las fotógrafas más importantes del mundo, sino en una con nombre de mujer.

Paula Blake: @paula__blake

Imágenes: Instagram de Annie Leibovitz