¿Qué fue del amor a primera vista? ¿Qué fue de ese flechazo cuando estabas entrando en el vagón del metro? ¿Qué fue de esa cena entre amigos en la que tu amiga traía a un nuevo invitado? ¿Qué fue del “te invito a una copa? ¿Alguien tiene respuestas a alguna de estas preguntas? Yo no sé que responder. Hace ya algún tiempo (parece que lo cuento como si hubiese nacido en la era del plestoceno) que he notado un cambio en esta nuestra sociedad y no voy a ser yo quien lo juzgue, (dios me libre) pero echo de menos esos momentos en los que todo era más sutil y todos nos esforzábamos en la búsqueda del amor (o lo que surgiese).
Hoy
Tinder, Grinder, Guapo, Guapa, Adopta un tío y demás apps han transformado el mundo. Ya no hace falta enviar flores o ir al balcón de tu amada a lo
Romeo y Julieta... con un simple "match", vale.
Con Tinder... Esto se acabó
Y claro si los mortales nos apuntamos a esta nueva tendencia, celebrities de la talla de
James Franco o
Hilary Duff no iban a ser menos.
Pero yo me pregunto ¿Funcionan? No seré yo el que lancé la primera piedra ya que he sido un habitual en dos de ellas, cabe decir que todas mis experiencias fueron nefastas. Todavía recuerdo una de mis escapadas a media noche antes de un examen, todo parecía ser una aventura digna de contar a nuestros nietos pero resulto ser un fiasco. El tipo en cuestión no paró de hablarme de desastres naturales y de política, que oye para conocer a una persona está muy bien, pero lo poco gusta y lo mucho agota. Yo buscaba desesperadamente el amor y el susodicho tras una intensa charla sólo deseaba llevarme al catre. Total que me quede compuesto y sin novio.
Como no me rindo, me dije a mí mismo “No pasa nada, solo ha sido una vez… queda gente normal en el mundo”. Tras toparme con “engañafotos” (aclaración: dícese de aquellos que ponen la foto de su vecino), degenerados sexuales y algún que otro loco que le falta ponerte el anillo tras la primera cita, decidí borrarme todas las apps de amor/sexo que hay en el mercado.
Siempre tengo en mi mente una frase célebre que os aportará un halo de luz en este tema: "El que va demasiado aprisa llega tan tarde como el que va muy despacio." William Shakespeare. Así que consejo de amigo a los buscadores del amor: No ceséis en el intento de encontrar vuestro príncipe azul pero no toméis el atajo fácil, suele haber más espinas que rosas.
Pablo Aragón - @aragon_pablo
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