Si tu punto débil son las piernas, estás leyendo el artículo indicado. Te contamos cómo hacer que tus piernas permanezcan calentitas en los meses de más frío y no solo eso, sino cómo cuidarlas durante el invierno para lucirlas bonitas durante todo el año. Además, por raro que parezca, a veces el mejor remedio para el frío es más frío. ¿No nos crees? Lee atentamente:

1. Hidratación

Aunque parezca que no tiene nada que ver, tener las piernas hidratadas hace que las tengamos más calientes (aunque al principio nos dé esa sensación de frescor recién echada). La piel en las épocas más frías del año sufre y se descama, por lo que mantenerla hidratada hace que el tejido se mantenga fuerte y resistente, previniendo así el desgaste y la entrada de frío por los poros. Te recomendamos esta crema Drenante Remodelante de Piernas de Somatoline Cosmetic de efecto frío, que además estimulará tus células para tener unas piernas fuertes y bonitas.

¡Ah! Y si tu piel es sensible y fina, evita tejidos como lana y acrílicos, ya que solo incentivarán más la descamación de tu piel.

2. Ducharse con agua no muy caliente

Cierto es que cuando hace un frío polar en la calle, lo primero que queremos es darnos una ducha bien calentita, pero esto genera un efecto rebote que resacará aún más la piel, por lo que si no te atreves con agua fría, al menos opta por la templada. Utiliza un hidratante post ducha para un resultado perfecto.

3. La clave está en los pies

Efectivamente, esto es una evidencia. Si mantienes los pies calentitos, el resto de tu cuerpo también lo estará, así que vigila el calzado que te pones (sobre todo cuando uses unas medias). Ten en cuenta que sea hermético y no deje entrar el frío por ninguno de sus ángulos, eso ayudará al calor podal. 

Olvídate de ponerte un calcetín encima de la media ya que eso puede provocar el efecto contrario o sin embargo, una presión al pie que nos será muy incómoda. Por lo tanto, el mejor consejo son unos calcetines de grosor normal y zapatos cerrados. 

4. Caminar sin zapatillas

Este método no le funciona a todo el mundo, pero es el mejor aliado para hacer que tus piernas descansen y se fortalezcan. Después de una larga jornada, recomendamos liberar el pie, ponerte unos calcetines gorditos y caminar por casa sin zapatillas. Mejorará la circulación de tus piernas, ¡eso seguro!

5. Haz ejercicio

Y finalmente, como siempre, el ejercicio es uno de los mejores aliados para nuestra salud, siempre. En el caso de las piernas, es un ciclo que provoca el resultado buscado: haciendo ejercicio activas las células de tu organismo, eso mejora la circulación y finalmente, provoca una constitución fuerte. De esta manera te será mucho más difícil tener frío en las piernas, ya que se mantienen activas. 

Con estos consejitos tendrás tus piernas entrenadas para el calorcito (además de estar sanas, fuertes y divinas, claro)...

 

Raquel Sanz: @raquel_sanz_8

Imágenes: archivo y cortesía de las marcas