En tiempos de cuarentena, son muchas las personas que ya se han empezado a preocupar por la falta de vitamina D en su organismo. Parece que se trata de una vitamina sin mera importancia, pero no. Lo cierto es que, entre otras cosas, esta influye directamente en determinados órganos y en los huesos, puesto que ayuda a absorber el calcio y fósforo, contribuyendo al mantenimiento de un desarrollo óseo correcto.
En pleno confinamiento, nos encontramos en un momento en el que para muchos, ir a hacer la compra es el único momento en el que podrán disfrutar de unos agradables rayos de sol (nuestra fuente principal de vitamina D)... Echamos de menos la sensación del sol acariciando nuestra piel, algo que creíamos insignificante pero que es capaz de subirnos el ánimo, activarnos, incluso hacernos sentir mejor. Y es que, aunque hay afortunados que disponen de viviendas con terraza y/o balcón, son muchos los que viven en pisos interiores o con poca presencia de luz natural.
Por eso la exposición solar, siempre que sea controlada, tendrá importantes beneficios sobre nuestra salud: control de la presión arterial, regulación de la melatonina (la hormona del sueño), metabolismo del colesterol…
El sol es energía, es vida y también representa uno de los bienes más preciados de nuestro país debido a sus numerosos días de sol al año. No obstante, mientras estemos encerrados en casa, os proponemos dos métodos con los que conseguir esos niveles de vitamina D que necesitamos. Palabra de VANIDAD.
1. ALIMENTACIÓN
Aunque solo el 10% de esta vitamina se consigue a través de la dieta, cualquier ayuda siempre funciona (y más en estos momentos en los que no podemos salir a la calle a la ligera).
Los alimentos ricos en Omega 3 y con grasas buenas, como el pescado azul (sardinas, salmón, atún...), los champiñones o las setas y los frutos secos, son una fuente ideal de grasas saludables que incrementan la vitamina D. Por otro lado, las semillas, los cereales integrales o las legumbres y hortalizas también son alimentos perfectamente indicados para absorber esta vitamina.
Imagen: Deliveroo
2. SUPLEMENTOS
Los suplementos no pueden tomarse a la ligera, de eso estamos completamente seguros. Por eso, aunque existan diversas opciones en dosis cómodas para paliar la falta de vitamina D, desde Vanidad te recomendamos consultarlo con un profesional, contrastando los síntomas con un análisis de sangre.
Asimismo, según indican varios expertos, una dieta equilibrada y con alimentos ricos en vitamina D complementada con 10-15 minutos diarios de exposición a la luz solar, serán suficientes para cubrir un posible déficit sin necesidad de suplementos. Eso sí, no te olvides de utilizar un factor de protección solar de acuerdo con tu tipo de piel.
Ver esta publicación en Instagramjust popping in to say hi and that I really appreciate you all ❤️ @savannahmorrowthelabel
La vitamina D es una vitamina que suele pasar desapercibida y muchos de nosotros solo tomamos consciencia de ella en verano, cuando nuestra única finalidad es coger un buen tono de piel y presumir de bronceado... Aun así, ahora más que nunca debemos darle la atención que se merece...
Y como dato interesante, os desvelamos que las pieles más oscuras son las que tienen más dificultad para conseguir niveles altos de la vitamina D. Curioso, ¿verdad?
Sofía Cintas: @sofcintas
Imágenes: Archivo e Instagram