Objeto de deseo: las joyas de Khai Khai
Creatividad en estado puro y en pequeño formato. Así son las joyas de Khai Khai que nos han robado el corazón...
Collares de perlas, ni pendientes de zafiros, ni maxi solitarios, ni pulseras plagadas de esmeraldas... Cuando pensamos en joyas siempre nos vienen a la cabeza las piezas barrocas y excesivas que sólo vemos en los escaparates y que tan solo huelen la calle por unas horas en eventos y galas de niveles ligeramente alejados del nuestro…
Pero hace tiempo que la palabra ostentación dejó de acompañar a la palabra joya, el minimalismo y la brillante sencillez también tienen cabida en joyería y el resultado siempre son piezas exquisitas y geniales. Si además las salpicas con diversión, frescura y diseños desenfadados el resultado sí es lo que nosotros llamamos una auténtica joya.
Así son las piezas que nos han enamorado por completo alzándose con el galardón de "objeto de deseo de la semana": Khai Khai Jewelry es sinónimo de joyas ocurrentes, ingeniosas y absolutamente deseables.
Su creador es Haim Medine ¿Te suena su apellido, verdad? Este artista no es otro que el hermano de la también genial Leandra Medine. ¡Parece que lo del arte, la originalidad, el descaro y el estilo va en la sangre! Sobra decir que Leandra es su mejor modelo... y con eso ya decimos mucho ;)
Objetos tan dispares como un dinosaurio, una araña, un flamenco, un puño, una exclamación, una interrogación, una sandía… Todo puede ser fuente de inspiración y conseguir su versión en microdiamantes brillantes. ¡Es imposible querer solo una!, nosotras encontraremos la ocasión perfecta para cada una de ellas.
Que hayamos abandonado nuestros años de infancia no significa que no nos guste jugar. Así que ahora cambiamos los anillos de plástico, collares de macarrones y pulseras de caramelo por piezas llenas de personalidad. Tan sencillas como especiales, huyen de los excesos sin caer en la monotonía, sin ser simplemente otro diseño más.
No podemos esperar a llenar nuestros dedos con sus símbolos digitales $ & # @ en su versión preciosa, no podemos esperar a adornar nuestro cuello de mil y un iconos de lujo, ni a vestir nuestras orejas con sus adorables diseños.
Parece claro que cuando el estilo se lleva en la sangre te conviertes irremediablemente en un creador de cosas bellas y Khai Khai es un ejemplo. Presentimos que este invierno nos va a tocar prescindir de algún capricho y romper el cerdito para concedernos alguno de estos caprichos preciosos.
Ana Horcajo - @anii_horcajo