Invadidos por el too much imperante en los últimos diseños de bolsos de las firmas tan míticas como Gucci, Chanel o Dolce & Gabbana, estamos siendo testigos de un período de nuestras vidas donde el bolso se ha alzado con un papel de absoluto protagonista en nuestros estilismos, y en nuestra vida diaria. La funcionalidad que en su día fue la idea originaria de éste accesorio ha ido perdiendo importancia en favor del diseño, o incluso del status que pueda aportarnos pasear en nuestra mano ese determinado modelo que todas tenemos en mente. AVANBLAN1-VANIDAD En ésta vorágine de bolsos excesivos, a menudo recargados y absolutamente deseados por todas nos encontramos esporádicamente con piezas que llaman nuestra atención, quizás por su especial sencillez, por sus preciosas y curiosas formas... O por ser diferentes a todos los it-bags que campan a sus anchas por escaparates, calles y editoriales. AVANBLANC 3-VANIDAD   Hoy nos fijamos en uno de esos objetos de deseo: Avanblanc. Un bolso que nos recuerda en parte al de nuestras abuelas, con sus adorables boquillas, a la vez que nos enamora con sus líneas de aires futuristas. Sus sinuosas curvas y sus formas tan peculiares y perfectas nos hacen pensar que estamos ante una escultura, una pieza de exposición quizás. Y lo cierto es que no vamos tan desencaminadas, porque Avanblanc es un guiño al surrealismo de Elsa Schiaparelli y Jean Cocteau. Un guiño enriquecido con ese estilo único, tan personal que ha hecho a sus geniales bolsos objeto de nuestros más profundos deseos. AVANBLANC Cada Avanblanc es una mezcla perfecta entre el arte clásico y el rigor y la irreverencia de los diseños gráficos modernos. En cada uno de ellos subyace una meticulosa atención al detalle, un uso obsesivo de materiales de alta calidad, una búsqueda incansable de la más alta precisión estética... Imposible no obtener un resultado impecable. AVANBLANC5-VANIDAD No sabemos si será su boquilla, sus curvas o sus colores. O quizá sea ese aire lady vintage que nos vuelve locas lo que nos hace desearlos sin remedio. Lo dicho: agárrense que vienen curvas... y nosotras, encantadas ;)   Ana Horcajo - @anii_horcajo