También es cocinero –de hecho, ganó MasterChef 5 y a día de hoy encabeza uno de los hot spots de Ibiza, Roto-. Jorge es el reflejo de que el arte se puede reflejar en diversas situaciones y mundos diferentes, desde el fútbol hasta la cocina, sin olvidarse de la música, su gran pasión.

Hoy esta inquietud ve la luz más allá de su círculo íntimo bajo el nombre artístico de 1NCORDIO y un debut llamado 'Tendente'. Charlamos con él para que nos cuente más:

Jorge, cuéntanos, ¿cómo está siendo tu verano?

Está siendo muy especial porque seguimos con una serie de miedos o respetos por la situación pandémica mundial, pero a la vez, estoy intentando explorarme musicalmente.

‘Roto’, tu restaurante en Ibiza, se ha convertido en el place to be por excelencia de la isla. ¿Qué se siente al estar detrás de todos sus platos?

Lo que está pasando con Roto es una cosa con la que estamos disfrutando mucho, porque a pesar de estar situados en Marina Ibiza, uno de los puertos más importantes del mundo, ofrecemos un trato y una experiencia muy cercana, muy honesta. A día de hoy Roto es muy parecido a ese club social donde la gente repite. 

¿Cuándo decidisteis abrirlo y por qué?

El creador de la idea fue Miguel, quien creyó firmemente que en ese rompeolas se podía construir un local. Al elegirme como su socio, intervenimos junto con Andrés, la persona encargada de los números en Roto. Los tres hemos hecho una familia que no para de crecer y que se está haciendo un hueco importante. ¿El motivo? Yo creo que lo importante es caer bien y nosotros lo hacemos.

Bajo el seudónimo de 1NCORDIO acabas de estrenar una faceta artística que, hasta ahora, solo conocía tu círculo más cercano. ¿Por qué decides mostrarla al mundo en este momento de tu vida?

1NCORDIO surge en una serie de condiciones y en una etapa de mi vida en la que estoy con muchas inquietudes. Me he dedicado 11 años de mi vida casi profesionalmente al fútbol, por lo que he estado desatendiendo también mi capacidad para hacer música. Luego surgió la cocina, MasterChef… y me cambió la vida. Por supuesto lo culinario me vuelve loco, -por ello sigo dedicándome a lo que me dedico-, lo que pasa que nunca cocino sin música, así que la prioridad en mi vida desde que me levanto es escuchar música.

El primer confinamiento me ayudó a tener todavía más claro que no me podía morir o permitir que se parara el mundo sin que yo reaccionara explorando la rama artística que más me llama y la primera pasión que desarrollé de pequeño.

Para ello me he buscado algunos locos como yo (risas). Por supuesto hablo de Blas Egea, el director de cine que ha apostado por mí y por la idea desde el principio.

¿En qué se parecen y en qué se diferencian 1NCORDIO y Jorge Brazález?

Para mí son el mismo. Solo que me he puesto ese disfraz porque la música y la vida son un juego que quiero seguir haciendo como si fuera un niño.

Lejos de lo que se pueda pensar, que es algo que molesta, incómodo.... 1NCORDIO no tiene connotación negativa para lo que lo conocemos, al igual que ROTO.

Aunque te estrenes ahora, como dices, la música y, sobre todo, la percusión, siempre han estado muy presentes en tu día a día. ¿Te viene de familia?

En mi familia siempre hemos buscado las palmas. La familia de mi madre es de Granada y la de mi padre de Sevilla... tenemos mucha sangre gitana en la que florece, especialmente en mí y en mis hermanos, la percusión. 

Aun así, es algo que hemos tenido guardado entre nosotros durante años. Nunca nos habíamos atrevido a cantar en casa. En fin, como que la música la hemos llevado un poco por dentro ¡pero yo no puedo más!, así que la voy a sacar y la voy a compartir. No sé qué va a pasar, pero sé que lo voy a disfrutar.

En tu primer single, ‘Tendente’, dejas patente de dónde vienes y cuáles son tus raíces. Desde la estampa de La Alhambra de Granada, hasta el cajón... ¿Qué era lo que querías reflejar con esta carta de presentación musical y con todas estas referencias de influencia andaluza?

Lo que he querido expresar con ‘Tendente’ es un mensaje muy limpio, con mucho respeto, y en el que quiero dejar claro que no entro en el mundo de la música mirando por encima del hombro a nadie, ni hablando excesivamente bien de mí. Creo que esta es una de las cosas de las que más se está pecando últimamente… 

La música tiene que ir más allá de un ego, más allá de hablar solo de tu dinero. Yo me expreso humildemente, busco Granada que es mi ciudad y busco el nido para empezar a contar una historia que voy a terminar explicando de muchas maneras. ‘Tendente’ tiene un mensaje más sugerente, busca un poco más la magia de lo vintage, de cuando se buscaba la paz en el mundo con canciones.

Dices que prefieres que cada persona que escuche ‘Tendente’, decida su significado y su fin. ¿Cuáles son para Jorge Brazález?

‘Tendente’ es un adjetivo medio cariñoso pero medio de regaño que me dice muchas veces mi padre. "Eres tendente a ser disperso, a trasnochar"… Ser tendente es tener tendencia a y la tendencia es pasión, aquello que la persona no puede evitar. Como se bien dice en la película ‘El secreto de sus ojos’, de Ricardo Darín: “las pasiones nunca se olvidan”.

En un fragmento de la canción dices: “Formentera, te como entera”. ¿Cómo se retroalimentan tu amor por las Baleares y tu tierra natal?

Igual que en la frase anterior digo “Rota está bien y cuida de los nuestros”, me sale también mencionar a Formentera porque es que –y literalmente lo haría- ¡me la como entera!.

Para mí Formentera es el sitio que me ha podido cambiar la vida, que me ha permitido buscar un estilo de rutina un poco más salvaje. Yo soy bastante silvestre y encuentro en la isla -también en Ibiza- mucha conexión. La llevo incluso tatuada, pero con J, Jormentera. 

¿Tienes algún tatuaje más en concreto que sea especial para ti?

Todos mis tatuajes tienen mucho sentido entre ellos y a la vez, ninguno, si es para alguien que no está dentro de mí. Me hago tatuajes porque son como notas, recordatorios. Así uso mi piel. Como cuando te escribes cosas en la mano, yo me escribo mensajes eternos que me hacen falta no olvidar.

Desde el primero, que fue ‘familia’ -y que me hice en Cali, Colombia, en un sitio súper antihigiénico-, hasta el último, han tenido algo que ver en mi vida.

Aunque tienes más de 200 mil seguidores, no te llevas especialmente bien con las redes sociales... ¿Cuál es tu relación con ellas?

Pues es una especie de amor-odio porque, por un lado, me gusta saber que no las necesito, pero por otro, a veces en la sociedad en la que vivimos te quedas un poco en fuera de juego cuando no tienes esa capacidad de estar en la actualidad.

No me gusta decir que odio algo, porque no odio nada, pero hay que tener un poco de cuidado. Al final, creo que hemos olvidado hasta cómo se llaman. Se llaman redes y, como las de los pescadores, se tiene que seleccionar muy bien la manera en la que intervienes en ellas. 

¿Cuáles son tus propósitos en lo que queda de año?

Pues con un ojo mirando a que la situación nos siga permitiendo entrar en la libertad que debemos vivir, y con el otro, ocupándome y estando muy pendiente de los negocios que tenemos ahora mismo, que por el momento no sabemos si vamos a mantener todo el año o no…

Somos víctimas del futuro y de lo que pase, pero mientras voy preparando una vida para ser feliz –espero que con música-.

 

Texto: Anna Alarcón @_annalarcon

Fotografía: Esther Boyarizo @estherboyarizo

Estilismo: Fanny Le Studio @fanny_lestudio