En verano, con el calor, todos buscamos salir de las grandes ciudades para acercarnos a las
zonas costeras y refrescarnos. Sin embargo, lo que muchos no saben es que muchas de las mejores zonas para darse un buen baño no se encuentran cerca del mar. Los lagos y piscinas naturales son una opción que no todos contemplan, pero que tiene un encanto de lo más especial.
Te descubrimos una serie de espacios en los que el hombre no ha intervenido y gracias a los cuales podrás entrar en contacto con la madre tierra en estado puro. Recorremos medio mundo en busca de los más espectaculares. Algunos de ellos aunque seguro que no lo imaginabas, ¡están en España!
Hamilton Pool (EE.UU.)
Una de las piscinas naturales más bonitas del mundo es la conocida como Hamilton Pool, situada en Texas (EE.UU.). Destaca por su forma redondeada y su techo de roca natural en forma de semicírculo.
Creada gracias a la erosión de un río subterráneo, esta pequeña maravilla forma parte actualmente de una reserva natural para que, al mismo tiempo que las visitantes disfrutan de ella, permanezca protegida.
Pamukkale (Turquía)
Al sureste de Turquía se encuentra la montaña de Pamukkale que traducido significa ‘castillo de algodón’. Esta famosa zona turística recibe dicho nombre por el tono blanco que lo tiñe, dando un aspecto de lo más característico.
Este paraje tan maravilloso reconocido por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad tiene unas aguas termales que añaden un halo de encanto aún más especial si cabe a la zona.
El Charco Azul (España)
Foto: www.holaislascanarias.com
En la isla de El Hierro, situada en el archipiélago de las islas Canarias se sitúa El Charco Azul, una serie de charcas de agua salada y cristalina de diversas profundidades que se alimentan de las mareas.
Si pasas por allí es de visita obligada la cueva submarina que se forma de manera natural. Esta zona desprende una magia única en parte por lo bien cuidada que está al evitar el turismo masivo.
Fatumea Pool (Samoa)
La Fatumea Pool, también conocida como Piula Cave Pool, es una de las maravillas naturales que esconde la isla de Samoa. Ésta se compone de un manantial natural que desemboca en el mar.
Moldeada por la naturaleza, esta piscina es el lugar perfecto para bucear al mismo tiempo que descubres los misterios de sus cuevas subterráneas.
Emerald Pool (Tailandia)
Como hemos dicho antes, las lagos y piscinas naturales pueden encontrarse en los lugares más remotos e inesperados. Este es el caso de la Emerald Pool situada en el corazón de la selva tropical de Sa Morakot (Krabi). Unas cristalinas aguas termales conviven en plena armonía con toda la maleza que las rodea.
Las Grietas (Ecuador)
En las Galápagos (Ecuador) el agua del mar se filtra por ciertas grietas formando este paraje natural con el mismo nombre. El agua que compone estas piscinas se caracteriza por ser dulce en la superfice, es decir el agua que se filtra, e ir adquiriendo un sabor salado en las zonas profundas debido al agua que llega del mar. Una característica tan curiosa como el paisaje que se crea al combinar el agua azul verdosa con las rocas de los acantilados que la rodean.
La Laguna Azul (Islandia)
En el suroeste de Islandia se dibuja un paraje único y de lo más pintoresco: La Laguna Azul. Estas aguas termales situadas a casi 40 kilómetros de la capital son una de las grandes atracciones turísticas del país. Su riqueza en sales y minerales junto a sus múltiples propiedades curativas ayudando a paliar enfermedades como la psoriasis ayudan a que aumente el éxito del lugar entre los visitantes.
Relájate, nada, disfruta y deja que el tiempo pase mientras contemplas un paisaje de película.
La Fontcalda (España)
En España otra de las preciosas piscinas naturales que podemos encontrar fruto de la Madre Tierra es La Fontcalda, en Tarragona.
Si este verano quieres optar por el turismo de lagos y piscinas en plena naturaleza, el paraje en el que se sitúa es ideal para pasar todo un día con amigos o familia. Disfruta de un relajante baño por la mañana y por la tarde aprovecha para reponerte en su zona de ocio.
The Fairy Pools (Reino Unido)
Parece un cuento de hadas pero es real. En la isla escocesa de Skye, en Reino Unido encontramos esta maravilla de la naturaleza. Llegar hasta ella no es fácil pero sin duda merece la pena.
El bosque de Glen Brittle es el que acoge este conjunto de cascadas y estanques de aguas cristalinas tenidas de color esmeralda.
Cenote Ik-Kil (México)
Para terminar nuestra selección de lagos y piscinas naturales nos desplazamos hasta la península de Yucatán, México. Allí destaca el Cenote Ik-Kill como uno de los grandes atractivos turísticos que nos ofrece la naturaleza.
A tan solo 3 kilómetros de la zona de Chichén Itza, rodeado de arboles, matorrales y la fauna característica de la zona se esconde este mágico lugar que no puedes perderte.
Leyre Ferrando - @leyreferrando
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