El mundo de la aromaterapia y las esencias puede parecer tan inhóspito a primera vista como un manual de instrucciones en una lengua extranjera. Muchas veces, este arte con base científica puede parecer más cercano al esoterismo y a disciplinas poco racionales de lo que realmente está, dado que muchos ignoran que el poder del olfato está presente en la cosmética desde tiempos remotos. Así, progresivamente se ha ido reivindicando su acción beneficiosa sobre el ser humano, a través de formulaciones que explotan sus efectos balsámicos sobre el cuerpo y la mente.
 
Con el fin de disipar dudas y acercar la aromaterapia nos proponemos, no solo enamorarte a través de la explicación de su funcionamiento y efectos, sino también descubrirte algunas firmas que han utilizado sus preceptos para configurar unos productos de calidad, eficaces y muy atractivos.
 
Pero, empecemos por el principio. El campo de la aromaterapia es tan antiguo como el mundo, o tanto como nuestro primitivo sentido del olfato. Conectado con alguna de las partes más recónditas de nuestro cerebro, si por algo destaca el olfato es porque funciona como un gatillo para despertar nuestra memoria. Probablemente te reconozcas en situaciones cotidianas en las que un olor te hace pensar inmediatamente en un momento pasado: un recuerdo feliz, una persona que ya no está o una experiencia que marcó una época. Este sentido tiene un poder como ningún otro sobre la nostalgia y la generación de recuerdos, pero también consigue efectos directos sobre la actividad cerebral y nuestro estado anímico. Esto es porque los nervios olfativos están directamente conectados con el sistema límbico, que se ocupa de la supervivencia, el instinto y los sentimientos.
 
Ese potencial había sido percibido desde la antigüedad clásica de manera intuitiva a través de la utilización de aceites esenciales. La cosmética partió de la aparentemente sencilla extracción de esencias de plantas, frutas y flores para aplicarlas sobre el cuerpo. Tremendamente poderosos, su capacidad de penetración y alta concentración hicieron que fueran muy apreciados y costosos entonces, rayando en el uso ritual sacralizado, de una manera similar al presente.
 
Los aceites pueden ser encontrados en múltiples canales de venta, desde en una farmacia hasta un herbolario, pasando por tiendas de belleza especializada. Pero, no todos son iguales, aunque se autoproclamen esenciales muchos no tienen una concentración adecuada para ser considerados así. Por eso es importante recurrir a firmas que aporten fiabilidad y usabilidad a partes iguales y nosotras sabemos a cuáles recurrir

 

Imagen: Aromatherapy Associates

 

Pioneras en el mundo de la aromaterapia, a las fundadoras de Aromatherapy Associateslas llaman las abuelas de esta rama porque se formaron con la alumna directa de los mismos creadores de la disciplina, Jean Valnety Marguerite Maury. Partiendo de este currículum impresionante fundaron una firma que nació en una cocina, pero que acabó asentando las bases de la aromaterapia moderna en Gran Bretaña. 

Su impecable diseño contenía más que interesantes mezclas de aceites esenciales, ya que su aproximación a la belleza se planteó desde la filosofía oriental, con su actualmente manida traducción delmindfulness. El objetivo de la firma es acompañar a las personas en su personal camino hacia el bienestar y por eso presentan gamas de productos en función de la preocupación específica (estrés, descanso, energía, respiración, etc.) que mezclan aceites esenciales en función de su beneficio terapéutico. En definitiva, sus productos plantean una visión holística de la belleza con mente, piel y cuerpo unidos por las esencias.

Imagen: Aesop

 

La firma australiana se ha hecho un hueco en los cuartos de baños más selectos por su diseño y rabiosa independencia, que forma parte de una impecablemente conformada imagen. Pero, debajo de la misma se esconde una interesante línea cosmética que ofrece formulaciones para la piel, el pelo y el cuerpo meticulosamente creadas. Su eficacia y atención al detalle no son excluyentes de un importante trabajo de lo sensorial en cada producto y precisamente en este aspecto se han destacado con respecto a su competencia, consiguiendo una legión de seguidores.

Dentro de su amplia oferta, impulsada por la demanda de sus propios clientes, destaca el tratamiento que hacen de los aceites esenciales. Con formato utilitario y conceptual, esta gama presenta un quemador de líneas arquitectónicas y un conjunto de esencias con nombre de mujer. Nuestra favorita es Catherine, perfecta para la mente agotada moderna: una compleja y refrescante mezcla de notas cálidas del cedro del Atlas, con acentos cítricos de la cáscara de naranja.

Imagen: Flores de Bach

 

Un enfoque diferente, basado en la propuesta del médico homeópata Edward Bach en relación a la enfermedad. Desde su investigación empírica determinó que muchos de los trastornos derivaban de un desequilibrio emocional, por lo que restaurándolo a través de lo que él llamó “terapia de las emociones” se podía volver a un estado saludable.

De toda su experiencia, que ha generado debates y estudios para rebatirla, nos quedamos con los 38 remedios a base de plantas, flores y árboles silvestres medicinales de la región de donde era originario, Gales, que se administran vía oral en diferentes concentraciones para aliviar las alteraciones existentes. Aunque en este caso hablemos de remedios cercanos a la homeopatía, el análisis de los mismos ha determinado que su efecto es comparable al de la medicina placebo en el medio-largo plazo. Por lo tanto, pueden ser recomendables en personas abiertas a experimentar con terapias alternativas y que atraviesen estados alterados puntuales, como estrés, agotamiento o irritación, siempre siendo bastante realistas y flexibles con los resultados esperables.

Imagen: Aveda

 

Otra firma creada en torno a una personalidad excepcional, en este caso Horst Rechelbacher, un estilista austriaco autodidacta que, partiendo de su talento natural, su experiencia en un prestigioso salón de Roma y su deseo de hacer algo diferente planteó una firma que considera la belleza de manera holística y desde la responsabilidad medioambiental.

En esa búsqueda de la armonía y el equilibrio buscó fundamentar sus propuestas cosméticas en el Ayurveda, el cual parte de la promoción del bienestar a partir del equilibrio de mente, cuerpo y espíritu. Colaborando con varios médicos hindúes formuló en los 70 su primer champú de clavo en una cocina de su piso estadounidense y desde ahí su crecimiento ha sido imparable, con la creación de productos para el resto del cuerpo y salones de belleza por todo el mundo.

De toda su propuesta nos interesa especialmente la línea relajante stress fixa base de lavanda, la cual contiene un roll-onenriquecido con aceites esenciales de lavandina y azahar para llevar consigo siempre que se atraviese por estados anímicos alterados. También con sus mezclas para equilibrar los siete chakras del cuerpo y restaurar el flujo de energía del mismo. Cada uno de ellos contiene una mezcla de aceites esenciales puros que, al vaporizarlos facilitando su penetración a través de la piel y el olfato, consigan actuar sobre el punto concreto para el que están diseñados.

Imagen: Weled

 

Otra firma que combina el saber de la cosmética natural con disciplinas que consideran la calidad espiritual de los individuos para tener un espectro más amplio desde el que comprender sus preocupaciones. Su fundador, Rudolf Steiner, partió de la antroposofía para formular su marca, Weleda. Esta corriente filosófica podría verse como una versión occidental del corpus oriental en torno al bienestar, ya que como ella considera indivisible la salud de cuerpo, mente y espíritu, colocando al ser humano en el centro. De esta manera, Steiner amplió los límites de sus investigaciones científicas al considerar también en ellas el efecto del ámbito espiritual.

El resultado es una línea sencilla y efectiva de productos, entre los que destacamos sus exitosos aceites corporales enriquecidos con aceites esenciales de granada (para casos de estrés oxidativo), espino (problemas de circulación), onagra (pieles maduras o maltratadas), rosa mosqueta (regeneración y nutrición intensas) o cáscara de limón (para regular y refrescar pieles normales).

 

 

Berta Almagro - @bertalmagro

Imágenes: cortesía de las firmas